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El MVP de la Jornada

Isco, el jugador con pegamento en las botas.

España ganó a Bielorrusia y el jugador del Real Madrid volvió a brillar. Su fútbol volvió a ser preciosista, aunque demasiado "bonito" para Vicente del Bosque. Todo esto forma parte de su aprendizaje.

En el Valencia CF aún siguen preguntándose cómo lo dejaron escapar. Estrella en las categorías inferiores del equipo ?ché? y de la selección española, el andaluz se marchó en verano de 2011 al Málaga, un equipo que presumiblemente se iba a convertir en uno de los grandes de España con el dinero del jeque. Su traspaso se fijó en seis millones de euros, muy pocos para ?el mejor joven de España?, tal y como afirmó José Mourinho en 2013, cuando el Real Madrid anunció su fichaje por 28 millones.

Todas las sospechas que había sobre su juego se han esfumado. Muchos creían que un futbolista con un centro de gravedad tan bajo no podría triunfar en el fútbol. Tampoco le ayudó al principio su escasa genética para defender. Isco era un futbolista brillante en la parte ofensiva, pero sin presencia en el equilibrio del equipo. Manuel Pellegrini, lejos de querer cambiarlo, fue sensible a su carácter y construyó un equipo a su alrededor, liberándolo de cualquier responsabilidad defensiva. Fueron dos años maravillosos en el Málaga, donde el pequeño mediapunta repartió goles y asistencias, todo repleto de bellos adornos futbolísticos.

Fichaje por el Real Madrid

En pleno proceso de españolización del equipo, Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, se decantó por su contratación en 2013. Isco era señalado como el Iniesta del futuro, y Florentino no quería que se le escapara. Su presentación, sin embargo, no fue como esperaba. Los rumores sobre su supuesta afición por el FC Barcelona provocaron algunos momentos incómodos. Incluso le llegaron a reclamar que besara el escudo, pero Isco no lo hizo. Sí su hermano, de tremendo parecido físico y quien ayudó a aliviar la situación. El jugador andaluz, fuera de las cámaras y en un tremendo gesto de madurez, apuntó que lo besaría cuando lo sintiera, antes no.

Un mes después, tras marcar en varios partidos, la afición del Santiago Bernabéu ya se había rendido a su magia. Aunque no ocurrió lo mismo con Carlo Ancelotti, quien le pidió que ?profesionalizara? su juego en el campo, no siendo tan solo un bello ?jugón? en la zona de ataque. A Isco le costó adaptarse a lo que le pidió el italiano, siendo por momentos un jugador desaparecido en la plantilla. A base de entrenamiento (cuenta El Mundo que Ancelotti le pidió más horas de gimnasio para fortalecer su tren superior) Isco ha ido mutando a un futbolista más completo. No ha perdido un ápice de su magia, pero ahora también corre para atrás, en la recuperación de balón (esta temporada suma 37), una faceta en la que antes pasaba inadvertido. Un excelente momento de forma que le ha llevado a la Selección española, de la que puede ser un fijo desde ahora. Su brillante partido ante Bielorrusia, coronado con un golazo, le ayudará, aunque aún tiene que pulir ciertos defectos, como proclamó Del Bosque: ?A veces ha querido jugar demasiado bonito?. Isco, a buen seguro, corregirá ese punto, aunque no cambiará su idea cuando pisa un terreno de juego: ?Me gusta divertirme?.

Italia-Croacia, un partido parado por las bengalas

Fue el gran encuentro del fin de semana, pero desgraciadamente los radicales croatas fueron los protagonistas en San Siro, estadio donde se jugó el partido. Una lluvia de bengalas obligó a parar el encuentro durante diez minutos, con la necesidad de que aparecieran también los bomberos. Respecto al partido, la Italia de Conte sigue sin convencer, al igual que Balotelli, quien volvió a firmar una gris actuación, y van muchas con la ?azzurra?. En los croatas brilló Rakitic y se lesionó Modric, quien estará de baja un mes.

Más tiempo parado estará el holandés Blind, jugador del Manchester United, quien se lesionó en el partido ante Letonia. La ?Oranje? volvió a ganar (6-0) después de varias derrotas gracias a la actuación de Robben, el único jugador que tira del carro en esta selección.

El reto de Bale

Apuntó el galés para él sería tan importante jugar la próxima Eurocopa con su selección como ganar la Champions League. Son las ansias de un futbolista que sabe que para ser el mejor del mundo necesita llevar a su selección a Francia en el verano de 2016. Bale está poniendo todo lo que tiene, arriesgando incluso su presencia con el Real Madrid (tras el penúltimo parón por selecciones estuvo parado un mes). Su fe y la de sus compañeros cosecharon un valioso empate a cero en la casa de Bélgica, una selección que parece haber perdido fuelle tras el Mundial de Brasil. 

Héctor Garcí[email protected]

Fotos: Realmadrid.com





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