El portero moderno de fútbol sala.

En este artículo se habla de la evolución del papel del portero a través de las innovaciones reglamentarias. Cómo entrenar a nuestro número uno para no estar sujeto a la portería y participar en la fase ofensiva del juego. La tendencia del fútbol moderno es tener cinco jugadores más versátiles que puedan jugar en varias posiciones e interpretar las diferentes situaciones. Esta regla no escapa al portero que a pesar de las muchas peculiaridades de su propio papel, está cada vez más involucrado en el proceso táctico del equipo. Esto significa que no debe ser visto sólo como alguien que defiende la portería de un ataque, sino como una real y verdadera quinta solución táctica en la organización defensiva y ofensiva. Esta integración en el proceso táctico ha sido estimulada principalmente por los nuevos cambios de reglamento que le permiten lanzar el balón con las manos (por supuesto, sólo desde dentro de su propia área) a todas las zonas del campo y ya no tienen la restricción de 4 segundos cuando él está jugando el balón en el centro del campo contrario. Es evidente que estas soluciones tácticas nuevas no tienen que perder de vista su función básica: la defensa de su propia portería, utilizando todas las posibilidades técnicas, tácticas, físicas y mentales permitidas por el reglamento.