Inicialmente los equipos adoptaban un sistema fijo con jugadores en ataque y en defensa... A partir de esta situación el juego se convirtió en movimiento, pero debéis tener cuidado de hacerlo sin sentido y confuso. ¿Cómo sorprender a la defensa rival, sin desequilibrarse? ¿Qué rol tienes en el juego? . Para el jugador la respuesta a esta pregunta no es tan fácil como vosotros pensáis. La razón es simple: la dinámica del desarrollo técnico y táctico del juego, en un sentido más amplio de una temporada, un proyecto para un entrenador y su equipo - hace que sea necesario contar con elementos flexibles en el campo, capaces de complementar la predisposición natural a un papel de una clara habilidad para adaptarse a situaciones cambiantes. Por todo ello no es casual que en el fútbol sala que el término universal tipifique para que deba ser capaz de hacer básicamente de todo en el juego. Este tipo de jugador es, sin duda el más codiciado y difícil de encontrar, pero sería erróneo pensar que en el quinteto ideal se compondría de cuatro jugadores universales y el portero.