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El MVP de la Jornada
Villa no se rinde
¿Quién dijo que Villa estaba acabado? Vicente del Bosque le lanzó el guante no convocándole para el partido ante Italia y el jugador del Atlético de Madrid lo ha recogido marcando dos goles en la última jornada. Es la respuesta que se esperaba del máximo goleador de la Selección española. No hace tanto Villa tuvo que soportar la presión de ser el '7' de España. Poco a poco, 'El Guaje' fue haciendo suyo el número, con actuaciones destacadas en la Eurocopa de 2008 y el Mundial de 2010. Los tantos ante el Celta confirman que Villa sigue teniendo el instinto de siempre. Tal vez ha perdido punta de velocidad, necesaria para construir jugadas imposible, como la del tanto ante Honduras en el Mundial de Sudáfrica. Un gol que, como los propios jugadores confirman, sirvió para que España se quitara de encima todo el miedo tras perder ante Suiza.
Un nuevo rol en el Atlético
Villa tuvo que soportar el pasado verano todo tipo de bromas por el poco dinero que pagó el Atlético por él. Poco más de un millón de euros. Una cifra que el asturiano ha amortizado de sobra. Su rol en el equipo de Simeone es otro. No es la punta de lanza, un papel que queda reservado para Diego Costa. Villa cumple una misión, es un jugador de equipo, como en la Selección. Abre huecos a Diego Costa o defiende la subida de los laterales si el 'Cholo' se lo pide. La sensación es que parece que finalmente se hará un equipo para afrontar su último gran reto: el Mundial. Para eso llegó al Atlético y para eso mantiene el hambre.
Cuando se pierde el hambre de competir cada día
Las grandes imperios siempre acaban cayendo. Pueden durar más o menos, pero siempre acaban pasando a los libros de historia. El Barcelona puede encontrarse en esa fase, en las últimas líneas. Los jugadores azulgrana, sencillamente, han perdido el hambre de competir cada fin de semana, de fajarse bajo la lluvia (como ante la Real) o competir en un campo seco (Valladolid). Como los grandes soldados en sus últimos suspiros, los jugadores del Barcelona se reservan para las grandes batallas: Champions League, la final de la Copa del Rey ante el Real Madrid y el Mundial. Una situación que, por otro lado, es normal. El triunfo (y el tiempo) desgasta. El Barcelona ha sido capaz de ser protagonista en los últimos diez años, renovándose cuando tocaba, como ocurrió tras la época Frank Rijkaard. Lo increíble entonces fue que el conjunto culé se encontró con Pep Guardiola, un entrenador que volvió al origen y se junto con la mejor fase de jugadores irrepetibles. El Tata Martino lo ha intentando también, pero su ascendente sobre los jugadores y el (temido) entorno azulgrana no es el mismo. Sus soluciones han terminado por enredar más al equipo, sobre todo a Neymar, muy oscuro en el Barcelona. No obstante, los azulgrana, recordémoslo, aún no ha perdido nada y siguen vivos en las tres competiciones.
El Bayern: cinco goles en diecisiete minutos
De lo ocurrido en el fin de semana me llama especialmente la atención los cinco goles del Bayern en apenas diecisiete minutos en el encuentro ante el Wolfsburgo. No importa que tengan la Bundesliga ganada, Guardiola les pide el máximo partido. Con él no vale administrarse para las grandes batallas. Con Pep cuentan todas.
por Hector García Salido
